Ya sabía que Alaska no estaba de acuerdo con las discográficas, la SGAE, la industria musical, el cánon y todo eso, porque una vez habló bien de la «piratería» y le retiraron su nuevo disco de las tiendas. Por supuesto, tuvo que retractarse para que lo volvieran a poner a la venta.
Ahora parece que ha perdido un poco más el miedo y hace estas declaraciones, las cuales se pueden decir más alto, pero no más claro:
[la crisis de la industria]… ¿en qué afecta al artista?, pues en que tendremos que distribuir nuestra música de otra forma. ¿En qué afecta a los fabricantes de discos?, en que desaparecerán. Yo no soy fabricante de discos, no es mi problema. El que tenga un problema que busque soluciones.
Via: David Bravo