Hace poco tiempo que he cambiado, mi ya lento pero bien aprovechado HTC Magic, por un Samsung Galaxy S.
Huelga decir que el cambio ha sido espectacular, y que el rendimiento del Galaxy es impresionante, pero como todo en esta vida, tiene sus pegas, y las pongo a continuación:
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El LED
¡Por favor! El led de notificaciones es algo que no debe faltar en un móvil con Android. Nunca pensé que lo echaría tanto de menos.
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Más botones
Echo en falta los botones de llamar, colgar y sobre todo, el botón de búsqueda. Este botón es muy útil para lanzar la función de búsqueda de cualquier programa que la implemente, sin tener que pasar por el menú o cualquier otra sección del programa.
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Usabilidad
El botón de encendido/apagado/bloqueo es muy incómodo de usar. Si usas el móvil con la mano derecha, al darle con el pulgar, tienes que apoyarte con el índice y corazón en el otro lado, y casi siempre pulsas los botones de volumen. Cuando consigues no pulsarlos, tienes un 90% de posibilidades de que se te resbale y se te caiga de las manos. Posible solución: Una funda para evitar los resbalones, pero no deja de ser incómodo pulsarlo con una sola mano.
La forma de quitar la tapa trasera para acceder a la batería, SIM y zócalo de memoria tampoco es fácil. Tienes que meter la uña por la parte de abajo y tienes la sensación de que algo se va romper.
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Pantalla
Mucha saturación. Los colores están exageradamente resaltados.
Veo la pantalla un poco grande para esa resolución. Noto la separación entre píxeles. En el Magic no veía esa separación.
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El aspecto es muy feo
El aspecto/tema —o como quieran llamarlo— que instala Samsung es feísimo. Mira que el que trae por defecto Android no es que sea una maravilla, pero no me gustan nada los tonos azules que usan aquí. Además, ese menú de ajustes con un color distinto para cada sección… ¡qué hortera!
La mayoría de estas pegas seguro que se solucionan instalándole una ROM a medida, pero ahora mismo no tengo tiempo como para ponerme a investigar este tema. Tampoco es plan de ponerse a hacer este tipo de cosas con prisas, que puedo acabar con un bonito pisapapeles…
Por lo demás, como ya dije al principio, el móvil es una pedazo de máquina. Estoy muy contento con él. Todavía no he tenido ningún cuelgue ni comportamiento extraño. Además, una cosa que me ha sorprendido es la duración de la batería; pensaba que me iba a durar menos.
Extra Bonus 1. Rootear el Samsung Galaxy S
Para terminar, aunque ya he dicho que no tengo tiempo para ponerme a trastear con ROMs, sí que lo he rooteado, que es bastante fácil y rápido. Sólo hay que:
- Descargar e instalar el Kies
- Descargar e instalar el programa SuperOneClick.
- Conectar el teléfono, arrancar el programa y pulsar el botón Root. Al cabo de unos segundos ya tendrás el móvil rooteado.
Extra Bonus 2. Apps útiles para migrar de tu antiguo móvil a un Android
- Sim2Phone. Para copiar los contactos de la SIM al teléfono.
- vCardIO. Para importar contactos de un fichero en formato vCard (vcf). Este es el que usé yo para pasar los contactos de un Sony Ericsson.
- Import Contacts. Lo mismo que el anterior, pero con algún detalle más.